sábado, 27 de abril de 2013

«»

Pálida, recordando momentos, quemando fotos.
¿De qué me sirve llorar mientras le escribo?
¿De qué me sirve escribirle?
No sé, duele.
 Es ese dolor que te consume por dentro hasta que solo quedan cenizas, ¿sabes?
No poder ordenar tu caos mental, ni tal solo disimular las ojeras.

Qué triste todo, pero eh, que yo estoy bien. (Ojalá) 


No hay comentarios:

Publicar un comentario